MAMA - PAPA
Mama, Papa, ya no estoy
con ustedes como acostumbraban a verme,
Su mirada no cruza más el
cielo vacio y ya no me oyen reír, gritar, jugar o llorar.
A veces sin embargo, todavía
estoy aquí, cerca de lo que me era familiar,
Capaz de ir y venir como
yo quiera, sigo siendo como me conocieron, con
Otra apariencia
imperceptible para sus ojos, pero que es una realidad para mi.
Sigo estando vivo, con mi carácter,
acordándome de todo lo que aprendí y
Siempre llenos de amor
hacia ustedes, quizá mas todavía, por que ahora
Es mi alma la que se
expresa.
No les pido que no lloren,
el llanto es como el aguacero que lava el alma;
ahora vivo en otra parte y
les pido pensar en mi de la misma forma en que me
recordaban cuando nos separábamos
por un corto tiempo, pues NOS
VOLVEREMOS A ENCONTRAR, se
los aseguro!.
Mientras tanto deben VIVIR
si… vivir sus vidas por ustedes y en HONOR a mi memoria.
Mama, Papa tengo muchísimos
medios a mi disposición para hacerles
Saber y entender que ESTOY
INMENSAMENTE VIVO; les puedo colocar
Índices en su camino para
que me puedan encontrar el libro que los
Iluminara o las personas
que los ayudaran.
Puedo manifestarme en sus
sueños o ponerles un perfume que les
recuerde mi presencia,
verme en la sonrisa y en el juego de otro(a) niño(a) y
hasta sentirme en el sol
de cada mañana o en el viento que acaricie sus caras.
Mama, Papa recuérdenme con
amor pero no se aferren al dolor a través del tiempo,
Y verán que cuando la
tormenta se calme en sus espíritus, cuando
hayan entendido que la
muerte no es un fin, cuando hayan aceptado mi partida
Y se hayan dado cuenta que
sigo estando vivo en su recuerdo, el cielo
se iluminara y nos llevara
a una maravillosa comunión en donde nuestras
almas se juntaran para la
eternidad.
Su hijo(a).
Autor:
Anónimo
Adaptado
por: Sandra Ximena Solarte Ch.
Psicóloga
– Asesor Familiar de Duelo
Parque
Cementerio – Jardines del Recuerdo Cali
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